Silva Kaputikyan (1919-2006) va ser una poeta i activista política armènia, reconeguda com la figura
poètica més destacada del seu país.
poètica més destacada del seu país.
Va nàixer a Erevan (capital d’Armènia), filla d’un conegut editor, i va estudiar en l’escola secundària
Krupskaya, per a poc després casar-se amb el també poeta Hovhannes Shiraz, amb qui va tindre a
Ara Shiraz, fill que es va convertir en un important escultor. Silva va ser durant tota la seua vida militant
del Partit Comunista d’Armènia (que aleshores era una república soviètica), i els temes tractats en la
seua poesia són el poble i la llengua armènies. Després de la seua mort, la seua casa va ser
transformada en museu en el seu honor.
Krupskaya, per a poc després casar-se amb el també poeta Hovhannes Shiraz, amb qui va tindre a
Ara Shiraz, fill que es va convertir en un important escultor. Silva va ser durant tota la seua vida militant
del Partit Comunista d’Armènia (que aleshores era una república soviètica), i els temes tractats en la
seua poesia són el poble i la llengua armènies. Després de la seua mort, la seua casa va ser
transformada en museu en el seu honor.
La seua obra va rebre multitud de premis i ha sigut traduïda a molts idiomes.
LA CANCIÓN DE NUESTRAS PIEDRAS
¡Piedras, vosotras sois la historia misma!
Entre desgracias y miserias fuimos
construyendo luctuosos edificios,
oscuros monumentos a lo oscuro.
Los creadores de ojos angustiados
sangre y sudor secaban en sus frentes
y eran negras las piedras en los muros
como nuestro destino negro y duro.
Negros los pensativos monasterios
son y son negros los antiguos templos;
ellos trasudan torturadas, serias,
las rígidas facciones de mi Armenia.
¡Piedra de luto, negras
en los pisos,
los techos
y los muros,
oh piedras trabajadas
abrumadas
por la huella habitual de las rodillas!
en algún sitio piedras de colores,
se ocultaban, hurtándose en rincones,
bajo la tierra, piedras de alegría;
como las brasas bajo la ceniza.
¡Oh piedras, tantos siglos vuestro sueño
conoció tiempos agrios y severos,
oh piedras, las rosadas
y lilas y moradas!
¡Surgisteis ya de sombras subterráneas,
no son para vosotras las tinieblas!
¡A la luz, a la tierra
irrumpisteis de nuevo hada los hombres-
y se alegró la tierra y ya las nuevas
paredes son color de primavera,
son del mismo color de nuestros días,
y ya todo el destino de mi Armenia
es igual al destino de sus piedras!
El tiempo nuevo con sus manos buenas
las despertó a la luz de la alborada.
¡Oh piedras, las rosadas
y lilas y moradas!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada